esta mañana al aikidoka se le apareció el fantasma de la lesión.
a mitad de práctica, durante un intercambio de mae ukemis con un compañero (parroquiano habitual de las prácticas matutinas) siendo el aikidoka el uke, y cuando ya había sido proyectado por su compañero, sintió engancharse el talón de su pie izquierdo en el hakama de nage. con el agravante de que esta vez a esta (mala) maniobra, se sumó un golpe de su propia rodilla en la frente.
sin embargo, no sabe con certeza si fue gracias a su mayor movilidad, a leyes de la física, o simplemente a causa del azar, su pierna logró zafarse antes de estirar demasiado el músculo, estom mismo (o quizás otras razones) hicieron que el rodillazo en la frente fuera en suma leve.
no se sintió mareado ni lesionado muscularmente, pero aún así el aikdioka tomó un breve descanso en una esquina del tatami, para después de unos minutos, retomar las acciones con igual o mayor entusiasmo.
no fue el único incidente de la práctica, que terminó con un 25% de bajas.
porcentaje en el que no estaba incluído el aikidoka, por cierto, quien terminó sin inconveniente la práctica, pero quien sin embargo no pudo lograr mayor concentración. por motivos en los que no vale la pena ahondar, simplemente tenía su cabeza en otra parte.
terminada la práctica, el aikidoka se encontró en la calle con un día hermoso, en el que se mezclaban las nubes, el sol y la lluvia, en un cuadro formidable.