mayo 19, 2007

se equivoca profundamente quien crea que la ausencia (de casi un mes) del aikidoka de este dojo virtual se ha replicado en el dojo compuesto por átomos que hay allá afuera.

para conocimiento del amable lector, el aikidoka ha asistido regularmente a sus prácticas tres veces a la semana (salvo alguna por allí que se habrá quedado dormido, todo hay que reconocerlo).

de hecho hoy (ayer para efectos de publicación) al aprendiz no le bastó con asistir lleno de entusiasmo a la práctica al amanecer, sino que también puso todo de sí (y lo consiguió con creces) para llegar a tiempo a la práctica de la tarde.

pero empecemos por el principio. en la mañana la práctica se centró en kaiten nage. primero sin proyección, luego con ukemi.

fue una práctica silenciosa, dirigida por sensei de la casa, que tuvo como aliciente la presencia de un amable sensei extranjero que ha venido a ofrecer sus siempre interesantes seminarios.

el aikidoka tuvo la posibilidad de practicar kaiten nage con este sensei, quien hizo sentir sumamente torpe e ineficaz al aikidoka. la forma como enfrentaba la técnica este aprendiz apenas hacía mover láxamente el cuerpo de sensei que, probablemente más por caridad que por otra cosa, se dejaba caer con desgano.

de todas formas fue una práctica interesantísima, que como siempre ha dejado hondas enseñanzas en este aprendiz (enseñanzas que, sin embargo, el aikidoka no está en condiciones de enumerar en este momento).

lo de la tarde fue absolutamente otra historia. como ya fue dicho, el aikidoka debió esforzarse al máximo para llegar a la hora, surcando la ciudad a toda velocidad sobre su bicicleta (reciente nuevo medio de transporte del aprendiz).

por lo mismo, fue un impacto sentir que todo había sido en vano cuando llegó al dojo y lo encontró a oscuras. ¿cómo era posible? chequeó la hora (chequeó el día también, no fuera a ser que sólo era viernes de tanto desearlo) y estaba todo bien, sin embargo no había nadie.

por suerte (porque no habría soportado la frustración de ese esfuerzo en vano) pronto apareció un sempai que de un salto abrió la puerta, encendió las luces y se lanzó con otra interesantísima práctica que, a pesar de la presencia de un nuevo alumno en el dojo, fue bastante compleja con técnicas todas a partir de katate dori tai noenka.

el aikidoka quisiera resaltar aquí un momento en el que, mientras estaba practicando con un compañero de mucho mayor graduación, después de hacer la técnica de manera deficiente (el aikidoka, por supuesto) uke de inmediato mutó a nage y dejó completamente atrapado al aprendiz, en ese lapso el aikidoka se trenzó en un interesante forcejeo con su compañero. un forcejeo que no tenía una pizca de irritación de ni de mala intención, pero en el que ambos se internaron a explorar llaves que poco tenían que ver con el aikido y eran más parecidas al jiu jitsu brasilero (disciplina que el aprendiz sólo ha visto a través de material audiovisual).

en resumidas cuentas, ha sido un día de aikido intenso y vigoroso y lleno de vitalidad, con el que el aikidoka espera suplir los cuatro días sin aikido que se le vienen por delante.

por último, algo que no fue consignado en su momento: el amable sensei que viene del extranjero ofrecerá un seminario durante este fin de semana. pero el aikidoka no asistirá.